Izquierda Unida - León

Hoy lunes 6 de febrero de 2012, La Plataforma contra la Violencia Machista de León se reúne, una vez más, para denunciar el asesinato de otra mujer, víctima de la violencia machista en la Localidad valenciana de Guadassuar. El presunto autor de la muerte, ya había sido condenado a seis meses de prisión y un año de alejamiento por violencia machista contra otra pareja en 2004.

Guardemos un minuto de silencio por esta nueva mujer asesinada.

Hoy:

No queremos escribir un manifiesto por las víctimas

No queremos realizar un manifiesto contra la violencia

No queremos elaborar un manifiesto para acabar con la explotación y las desigualdades

Queremos elaborar un manifiesto con el firme compromiso de no regresar nunca más a Botines para concentrarnos contra cualquier muerte.

Queremos escribir un manifiesto para constatar que la violencia y la muerte se van de vacaciones.

Queremos elaborar un manifiesto que denuncie el último asesinato de la mujer a manos de un varón por razones machistas.

Queremos terminar el manifiesto que anuncie la desaparición de las desigualdades, de la explotación de la mujer por el hombre y del sistema que creó a ambas.

Pero, lamentablemente hoy no va a ser ese día.

En plena vorágine capitalista, en plena expansión del poder de los mercados, la economía está ocupando la mayor preocupación de la ciudadanía y su consecuencia más inmediata, el desempleo, es su mayor temor. Para los gobiernos amigos y, por lo tanto, cómplices de este sistema económico especulador y mercader, la creciente desigualdad y el aumento consecuente de la violencia de género ha pasado a un segundo plano, si es que alguna vez ha ocupado otro.

El patriarcado y el capital, en armonía permanente, han encontrado de nuevo un momento propicio para nuevas alianzas a la hora de despojar a las mujeres de los derechos conseguidos con tanto esfuerzo.

A nivel internacional nos hemos llevado la gran decepción con la llamada ‘Primavera Árabe’, al comprobar que las revoluciones han sido absolutamente manipuladas para conseguir unos fines aparentemente democráticos, que en nada pretendían cambiar las condiciones sociales de las mujeres de estos países. Muy al contrario, algunos de estos países anteriormente laicos ahora han sido tomados por la fuerza de los integrismos religiosos y a las mujeres les espera un futuro mucho peor.

Es alarmante el olvido de las mujeres afganas, el aumento de las ablaciones hasta en entornos occidentales, el afianzamiento de las redes de tráfico y la trata de mujeres y niñas para su explotación sexual mediante la prostitución.

En nuestro Estado, la situación de las mujeres se ve agravada por las nuevas políticas del Gobierno del PP, (que van desde cambiar de nombre a la Violencia de Genero, volviendo a conceptos obsoletos como violencia doméstica, a reducir drásticamente, el presupuesto destinado a combatir la violencia de género) .Así nos encontramos con cifras tan dramáticas como las 8 mujeres asesinadas hasta ahora.

Los contratos a tiempo parcial y precarios son la oferta laboral para las mujeres. El final del año 2011 refleja cómo del casi medio millón de personas que trabajan a jornada parcial, nada menos que el 96% son mujeres, es decir, 9 de cada 10 jornadas parciales, fundamentalmente dedicadas al cuidado, las hacen mujeres.

Aumentan las emisiones televisivas donde se denigra la imagen de las mujeres y se las convierte en meros objetos, además de que cada vez hay más anuncios comerciales donde las mujeres somos la ‘recompensa’ al comprar la mercancía. Todavía seguimos reivindicando que el lenguaje nos incluya para ser nombradas y designadas en femenino singular y plural.

Por eso, otra vez nos vemos obligados a reivindicar una verdadera coordinación política y administrativa para atajar esta lacra social. Para las mujeres tampoco es nuevo que exijamos la implicación de todos los poderes públicos en dar las respuestas que la sociedad está reclamando y conseguir un mundo sin Violencia de Género, pero a estas alturas no queremos quimeras ni promesas, queremos realidades tajantes con resultados inmediatos.

Hacemos ahora un nuevo recuerdo a las mujeres asesinadas con los siguientes versos:

Libre te quiero
como arroyo que brinca
de peña en peña,
pero no mía.

Creí en el amor de verdad.
Creí en un mundo diferente.
Fui muy guapa por un día,
por un tiempo solamente.

Grande te quiero
como monte preñado
de primavera,
pero no mía

Me decías cosas bonitas,
halagando así mi mente.
Fui la víctima de un sueño,
de un gran mar en que perderme.

¿cuántas veces te ha hecho callar?
¿cuánto tiempo crees que aguantarás?
¿cuántas lágrimas vas a guardar
en tu vaso de cristal?
si tienes miedo, si estás sufriendo
tienes que gritar y salir, salir corriendo

Agustín García Calvo, Selene Urbano (alumna de 3º ESO), Amaral

¡Un mundo en IGUALDAD, un mundo SIN VIOLENCIA!